Una novedosa herramienta, a través de un modelo matemático, permitirá conocer la utilidad de los residuos en la industria agro alimentaría, siendo una herramienta replicable a otras industrias.
El proyecto Model2bio involucra a diversos actores europeos y busca conseguir una herramienta capaz de predecir y otorgar una segunda utilidad a los residuos de la industria agro-alimentaria, para reciclarlos y reutilizarlos. El proceso de investigación incluye la prueba y validación de industrias cárnicas, vegetales, lácteas y de bebidas en España, Bélgica, Países Bajos y Grecia. Cuenta con la participación de empresas industriales, centros tecnológicos, universidades y distintas organizaciones que otorgarán una visión heterogénea y complementaria.
La herramienta consiste en un modelado matemático predictivo que estime la utilidad de cada residuo alimentario. El análisis técnico incluye la selección de la industria idónea para reutilizar los desechos analizados llevando a cabo, al mismo tiempo, un estudio de rentabilidad económica. El modelo matemático final tendrá en cuenta la composición química y las características físicas de los flujos residuales agroalimentarios, la mejor ruta de valorización de estos y su potencial para la recuperación de recursos y energía en cada valorización, así como también la estacionalidad y ubicación geográfica.
Los resultados y soluciones que genere el proyecto tendrán un peso enorme en el medioambiente, teniendo en cuenta que la mitad de los desechos globales que se generan en el mundo provienen da la industria agro-alimentaria (3 millones de toneladas/día), siendo su inclusión en un proceso de economía circular uno de los grandes retos de ámbito mundial.
El proyecto tendrá una duración de tres años y estará financiado por la iniciativa Bio-Based industries Joint Undertaking (BBI JU) del Programa Horizonte 2020, el programa europeo para investigación e innovación de diversas áreas temáticas. Model2Bio, enmarcado en el ámbito de la Economía Circular, está alineado con el objetivo europeo de reducir significativamente la cantidad de biorresiduos enviados a los vertederos. Convirtiéndose en un sustituto potencial de los recursos basados en combustibles fósiles y utilizarse como materia prima para las industrias de base biológica.